Protege tu corazón manteniendo una buena higiene bucodental

¿Sabíais que está demostrado que hay una relación directa entre nuestra salud bucodental y las enfermedades coronarias? Pues así es, y los estudios más avanzados así lo demuestran. Por eso es de vital importancia que cuidemos nuestra dentadura pero, más aún, aquellas personas con enfermedades cardiovasculares conocidas o en riesgo de padecerlas.

Para que nos hagamos una idea: la periodontitis (enfermedad de las encías), sea en una etapa moderada o avanzada, aumenta el riesgo de sufrir enfermedades del corazón notablemente. Además, la salud bucal puede proporcionar a los médicos señales de advertencia para una gama de enfermedades y condiciones, incluyendo aquellas relacionadas con el corazón.

La clave está en las bacterias

Cualquier herida infectada puede provocar infección en la sangre y, por ende, hacer que dicha infección llegue hasta nuestro corazón. Sin embargo, cuando hablamos de heridas comunes y tratadas, esta concatenación de hechos no suele ocurrir pues tanto nuestro organismo, preparado para combatir los gérmenes y las bacterias, como las curas que hacemos de las heridas, evitan que cualquier infección pueda causarnos daños graves.

Sin embargo, la propagación de bacterias y otros gérmenes, desde nuestra boca a otras partes de nuestro cuerpo mediante el torrente sanguíneo, son mucho más habituales, pues cualquier infección en la encía puede mandar las bacterias derechitas al corazón. Allí, se adhieren a cualquier área y causan una inflamación que puede acabar en enfermedades como endocarditis.

Según los profesionales de la Clínica Dental de la Dra. Cahero, el cepillado de los dientes es fundamental para prevenir esas infecciones bacterianas en los dientes. De hecho, la Asociación Americana de Cardiología recomienda el cuidado de las encías como una más de las estrategias de prevención de la cardiopatía isquémica, que es una enfermedad ocasionada por la arterosclerosis de las arterias coronarias, que son las encargadas de proporcionar sangre al músculo cardíaco (miocardio).

Pasos para cuidar nuestra salud bucal

La mayoría de los expertos recomiendan cepillado, colutorio, hilo dental, y visitas periódicas al dentista, pero para profundizar un poco más en el tema hemos hablado con los especialistas de Cooldent, quienes recomiendan lo siguiente:

  • Cepillado Diario: lo más correcto sería cepillarnos los dientes después de cada comida pero, como mínimo, debemos hacerlo tres veces al día durante tres minutos si nuestro cepillo es manual y unos dos minutos si hablamos de un cepillo eléctrico. Debes recordar pasar por todos los rincones de la boca, sin olvidarte de la lengua. Además, intenta comprar una pasta dental que se adecúe a tus necesidades concretas: extra de flúor, sensibilidad dental, anticaries, blaqueador…. Consulta con tu especialista si tienes alguna duda.
  • Usa seda / hilo dental una vez al día: hay lugares interdentales donde el cepillo no puede llegar y donde se acumula comida que acabará por pudrirse y provocar halitosis, caries e infecciones. Pasarnos el hilo dental ayuda  aprevenir estos problemas. Preferiblemente usa este producto en el último cepillado del día.
  • Un buen colutorio: del mismo modo que ocurre con las pastas de dientes, hay colutorios específicos para cada problema o condición de salud bucodental, tu dentista te recomendará el que mejor se adapte a ti. Úsalos una vez al día y evita beber líquidos hasta pasados 30 minutos para no menguar su efecto.

Con estos tres sencillos pasos y la visita periódica a tu dentista de cabecera para una revisión cada seis meses o un año, conseguirás tener una salud bucodental de hierro.

Compartir:

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Más comentados
Las enfermedades cardiovasculares

Todas las enfermedades cardiovasculares están vinculadas entre sí. El punto común es la arteriosclerosis o enfermedades relacionadas con

Comer despacio

Los principios básicos de una buena dieta consisten no en lo que comemos sino en cómo lo hacemos.

Diviértete haciendo deporte

Cuando no tenemos costumbre de hacer ejercicio, nuestro principal enemigo es la pereza. Si nunca hemos practicado deporte, tenemos la

¿Correr o caminar?

A la pregunta de qué es mejor, si correr o caminar, la verdad es que no podemos ofrecer

Our gallery
Scroll al inicio