El ritmo de la vida de una persona con trabajo y familia, o el de una persona con muchas responsabilidades, lleva inevitablemente a acumular una gran carga de tensión y de estrés a nuestras espaldas. Falta decir que estresarse es muy difícil, pero liberar esa tensión no lo es.
Esta tensión nos puede llegar a provocar varias consecuencias físicas. En primer lugar, como consecuencia de las situaciones de estrés prolongadas, nuestra presión arterial aumenta, así como el azúcar en sangre y la alteración de procesos fisiológicos. También pueden provocar desórdenes en nuestras rutinas, como el aumento de la ingesta de comida, que nos llevan a mantener una situación en la que el corazón sufre.
Según a que se dedique una persona u otra los niveles de estrés varían. Según una reciente noticia, el 84% de la población española sufre estrés. Y a través de diferentes estudios, se ha realizado una escala de las profesiones que más estrés generan. Porqué está claro que no genera el mismo estrés ser un técnico que trabaja cuando hay un fallo, que apagar un incendio que puede arrasar con superficies muy grandes.
Pues bien, según el estudio mencionado en el párrafo anterior, las tres profesiones más estresantes son: militar, bombero y piloto de avión, por ese orden. Y, por el contrario, las tres profesiones menos estresantes son: ecografista, compliance officer y estilista de peluquería. Si lees esto y te echas las manos a la cabeza, porque consideras que realizando las labores descritas sientes mucho estrés, he de explicar que el estudio se realizó en los Estados Unidos.
Maneras de liberar el estrés
A pesar de lo dicho, existen maneras de liberar el estrés, y a pesar de lo que se pueda imaginar, algunas son más sencillas. A continuación, hablaremos sobre cuatro consejos básicos para liberarnos de responsabilidades, o maneras de liberar el estrés.
En primer lugar, hablaré de la delegación de funciones. Un error que cometemos normalmente, es asumir más tareas de las que en realidad podemos realizar. Esto hace que nos sobrecarguemos de tareas que, quizá, no podamos asumir. Eso hace que tengamos una gran carga de trabajo dentro y fuera de casa, aumentando el estrés de nuestro día a día. Delegar hace que no tengamos que preocuparnos de tareas que otras personas puedan hacer. También es importante, en este sentido, aprender a decir no.
En segundo lugar, hablaremos del deporte. El deporte es una actividad que nos ayuda de manera significativa a controlar el estrés, y a ser más felices. Realizar un deporte habitualmente hace que nuestro corazón trabaje, haciéndolo más resistente. Además de los beneficios físicos, el deporte segrega hormonas naturales que nos hacen más felices. Además, dedicar momentos para realizar deporte, tiene beneficios a la hora de dedicar más tiempo para nosotros, y eso puede ser liberador. Pero sin duda, el beneficio que más nos interesa es la gestión que realiza nuestro cuerpo sobre sustancias que generan estrés, como la adrenalina; haciendo deporte nuestro cuerpo quema todo el exceso de sustancias que aumentan nuestro ritmo cardiaco.
En tercer lugar, vamos a introducir la meditación. Que no te lleve a engaño los pensamientos que te puedan surgir sobre la meditación. Meditar no es más que liberar la mente de todas las preocupaciones de nuestro a día a día, haciendo que vivamos el momento presente. Meditar nos ayudará a concentrarnos más fácilmente, a controlar el ritmo cardiaco, y a superar las situaciones que generan estrés o sufrimiento interno.
Por último, hablaremos de los tratamientos corporales que proporcionan los masajistas. El estrés genera contracciones en nuestros músculos que podemos sentir a lo largo de nuestro día. Un ejemplo de empresa líder de este sector es Evasiom Spa, un santuario para el cuerpo y los sentidos. Inspirado en los mejores Spas del mundo, Evasiom Spa te sumerge en un mundo en el que la iluminación, los sonidos y los olores proporcionan una experiencia sensorial única.
En conclusión, hemos explicado cómo podemos liberar el estrés para conseguir mejorar la salud de nuestro corazón. Gracias a la meditación, el deporte, la delegación de funciones y el tratamiento de masajes, conseguiremos reducir nuestro estrés y llevar una vida más feliz.